Los gitanos vinieron desde India
Según la leyenda, Bahram Gur, Rey de Persia, pidió al Rey del Norte de la India que le enviara diez mil músicos y sus mujeres para unas fiestas. Encantado e impresionado por el talento de los músicos, Bharam Gur les invitó a quedarse en su reino para siempre, ofreciéndoles tierras, granos y ganado. Los músicos no sabían nada acerca de ser granjeros, y pronto se quedaron sin granos, sin ganado y las tierras sin cultivas. El Rey no pudo soportarlo y enfurecido expulsó de su país a los diez mil músicos gitanos.
Si bien no hay acuerdo sobre el origen del pueblo gitano (también llamado romaní o rom) todo los estudios lingüísticos, antropológicos y de genoma, lo ubican como originario del norte de India (que hoy comparte con Pakistán) y que por causas inciertas iniciaron su camino a Europa adonde llegaron alrededor del 1400, tras un viaje intergeneracional que les llevó atravesar Asia central, Oriente Medio y las tierras del Cáucaso, sin apenas mezclarse con las poblaciones autóctonas.
Entre los pueblos gitanos de la India actual los kalbeliya representa la más emblemática. Viven en los límites del desierto de Thar, en el estado de Rajastán. Con este video disfruta de su arte:
Kalbeliya significa “aquellos que aman a las serpientes”. "Kal" significa muerte y el nombre sugiere el dominio de la tribu sobre las serpientes venenosas y el miedo a la muerte.
La identidad del pueblo gitano está profundamente arraigada en su religión y sus creencias. Según la mitología hindú, Lord Shiva ofreció un cuenco con todo el veneno del universo a Kanipa, quien lo consumió todo de una vez para demostrarle su total confianza y dedicación. Impresionado, Lord Shiva le prometió a Kanipa que el mundo se ocuparía de él y de sus descendientes. Esta promesa incluía el dominio sobre el veneno y las criaturas venenosas. Este hecho mitológico explica la ocupación tradicional de los Kalbeliya, seguidores de Kanipa, como encantadores de serpientes, cazadores de serpientes y comerciantes de veneno. También son curanderos capaces de curar mordeduras de serpientes venenosas. A lo largo de las generaciones, los Kalbeliya han adquirido un conocimiento único de la flora y la fauna locales y conocen los remedios a base de hierbas para diversas enfermedades, que es una fuente alternativa de ingresos para ellos.
Photo by Varun Verma on Unsplash
Reverencian a las cobras y tratan de preservarlas. Cuando una serpiente entra a una vivienda o es avistada en un pueblo, son los kalbeliyas los que se ocupan de atraparlas con vida y sin lastimarlas.
La mayoría de la colectividad Kalbeliya sigue una ruta circular preestablecida y dictada por los trabajos ocasionales que realizan en los campos de cultivo. Instalan sus carpas en las afueras de los pueblos y ciudades y allí se los puede encontrar, una explosión de color en el medio del desierto.
En la actualidad muchos tienen sus animales de pastoreo y ofrecen show con su música y danza en hoteles y fiestas.
El canto y los bailes folclóricos de los gitanos de Rajastán fueron declarados por la UNESCO Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, al considerar que ” Transmitidos de generación en generación, los cantos y los bailes forman parte de una tradición oral que carece de textos y manuales de aprendizaje. Para la comunidad de los kalbeliyas, el canto y la danza constituyen un motivo de enorgullecimiento y un signo de identidad en una época en la que su nomadismo tradicional y su papel en la vida rural están declinando. Además, son una buena muestra del propósito de esta comunidad de revitalizar su patrimonio cultural y adaptarlo a la evolución de las condiciones socioeconómicas. Puedes leer la declaración de la UNESCO AQUÍ